Su hijo presenta ¿Rechazo a dormir solo o temor a quedarse solo? ¿Pesadillas reiteradas sobre la separación de sus seres queridos? ¿Preocupación excesiva por perderse o por su seguridad? ¿No quiere ir al colegio? ¿Dolores de cabeza o de estómago? ¿Preocupación por dormir fuera de su casa? ¿Esta siempre pegado a su  madre, padre o familiares? ¿Rabietas si lo separan de sus familiares o personas que lo cuidan?

El trastorno de ansiedad por separación (TAS), se caracteriza por un miedo o ansiedad excesiva ante la separación real o por anticipación de las personas por las que siente apego o del hogar. Los niños se quejan de forma repetida de síntomas físicos (dolor de cabeza, dolor de estómago, náuseas, vómitos) cuando se produce o se prevé la separación de las figuras de mayor vínculo. Cuando se les exige la separación, presentan crisis de angustia por lo que tratan de evitar situaciones como ir al colegio, jugar con amigos, dormir fuera de casa. Sienten una preocupación excesiva ante la posibilidad de perderse, enfermarse, ser raptados, tener un accidente y ser alejados de sus familiares; además, sienten temor de que les llegue a suceder algo grave a las figuras de apego, estas situaciones antes mencionadas les pueden generar pesadillas.

Psicoterapia Cognitivo Conductual

El terapeuta entrena y ayuda al niño a reconocer en su cuerpo las reacciones físicas que corresponden a signos ansiosos. Indaga cuáles son sus miedos y expectativas de lo que cree que sucederá. Le enseña a modificar su dialogo interno de afrontamiento y desarrolla estrategias personalizadas, para que afronte su ansiedad de forma efectiva en las diferentes situaciones temidas. Se usan técnicas de exposición en vivo y/o en la imaginación, relajación, juego de roles, práctica y recompensa.